En todo el libro de Gálatas, el Apóstol
Pablo ha estado dirigiendo palabras a un grupo de personas que querían
influenciar a los cristianos para que dependiesen de ellos.
Nuestro enemigo, Satanás, siempre va a
tratar de sacarnos a través de doctrinas o de una y otra cosa, principalmente a
través de la escasez, como que no tenemos ni tenemos acceso a todo.
Una persona colocó en el Facebook: “Hemos entrado a un ayuno de 21 días.”
¿21 días es un número mágico? ¿Por qué no 15? ¿Qué tiene que ver con 21 días?
Otra persona que conozco también colocó
en el Facebook: “Hemos entrado a un ayuno
de 21 días.”
Y otro pastor que conozco colocó:
“Estamos luchando por la gloria.” Lo decía en el sentido de que estaban
persistiendo para que Dios les de Su gloria. Y yo escribí en el muro de este
pastor: “Ustedes están luchando para
tener la gloria pero nosotros vivimos en ella.”
Y un joven comentó debajo: “No sé si pusiste esto para animarlos o para
darles un golpe bajo peruano.”
Porque no luchamos por la gloria,
vivimos en ella. No estamos tratando de que Dios haga algo, vivimos caminando
con Dios. Siempre abiertos para que Él se manifieste de alguna manera, pero no
tratando de ponerlo dentro de nuestra cajita.
Porque mucha gente tiene a Dios dentro
de su cajita; dicen que Dios es de cierta manera y solo puede hacer las cosas
así. Y que solo ese es el mover del Espíritu Santo, pero no es así.
Dios es mucho más grande que nuestra
cajita, y lo que realmente quiere hacer es vivir a través de nosotros.
Y aquí en Gálatas 4:16 dice: “¿Me he hecho, pues, vuestro enemigo, por
deciros la verdad?”
A veces la verdad duele; hay que hablar
la verdad en amor, pero a veces la verdad duele.
Y cuando una persona le habla la verdad
a otra, a veces esta persona se vuelve su enemigo porque piensa que está en su
contra por decirle la verdad. Pero no es así, realmente la persona que nos
habla la verdad en amor es nuestro mejor amigo, no nuestro enemigo.
Por ejemplo, un ministro amigo estaba
haciendo algo que no era muy saludable para él y la gente a su alrededor.
Entonces yo le mandé una carta bastante directa y bastante específica acerca de
las cosas que estaba haciendo, las cuales eran peligrosas para su ministerio.
Yo decía ahora estamos en su lista
negra, y mi esposa me dijo que no era así porque ya no estamos en la lista.
Nos hemos vuelto en sus enemigos sin que
se dé cuenta de que somos sus mejores amigos; por decirle acerca de algo que va
a destruir su ministerio y hacerle notar que eso no está bien, inmediatamente
nos volvimos sus enemigos.
Por eso, esto es lo que Pablo le está
diciendo a la gente de Galacia.
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